Fuente: Eldefinido.cl
Conversamos con Francisco Balart, uno de los fundadores de Más Skate, organización que a través de escuelas gratuitas de skate, entrega apoyo psicológico, académico y deportivo a niños y jóvenes en riesgo social y a sus familias, fortaleciendo su autoestima y sacándolos de un entorno riesgoso.
Actualmente el skate es uno de los deportes favoritos entre adolescentes y jóvenes, siendo reconocido como el segundo deporte más practicado en Chile, después del fútbol. Esto se debe a que es un deporte urbano, de calle, de riesgo y de amistad. Es un deporte que permite agrupar a jóvenes, generar nuevas destrezas y, por supuesto, se convierte enun ecosistema para compartir y relacionarse de forma saludable.
Esto bien lo sabe Francisco José Balart junto a su amigo de la vida, Andrés Charlín,quienes llevan ya muchos años haciendo piruetas arriba del skate; quienes decidieron el año 2014, hacer de su pasión un verdadero emprendimiento social, formando Más Skate: fundación que se dedica a administrar skateparks y a entregar clases gratuitas a niños y jóvenes en riesgo social de Santiago, y que además brinda apoyo multidisciplinario que consta de apoyo sicológico, deportivo y escolar, a través de voluntarios, profesores de skate y de un psicólogo que se ha integrado al equipo permanente de la fundación.
Conversamos con Francisco, quien nos cuenta lo apasionante que es ver cómo los niños y jóvenes se empoderan con este deporte, cómo empiezan a creer en sus capacidades, cómo logran socializar sanamente, cómo comienzan a respetar rutinas y horarios, y así también cómo logran mejoramientos escolares sorprendentes.
¿Cuándo y por qué surge Más Skate?
«Más Skate nace como idea a fines del 2013. Por esa fecha con mi socio Andrés Charlín teníamos una importadora de artículos deportivos y traíamos unos skate tipo mini cruisers, que son unas tablitas pequeñas de plástico y de colores. Al principio nos fue bien, pero hubo un paro en aduanas y no pudimos con los costos extras que eso generó y quebramos. Después de ese fracaso decidimos seguir emprendiendo, pero esta vez queríamos que tuviese más sentido el emprendimiento, pero que siguiese ligado al skate, deporte que a ambos nos apasiona, y se nos ocurrió hacer algo más social. Y así fue como el 4 de febrero del 2014 nació Más Skate como una personalidad jurídica sin fines de lucro, una fundación».
¿Qué beneficios entrega el skate que no entrega el fútbol, por ejemplo?
«El skate está en línea con los valores deportivos, entrega compromiso y disciplina. Ademásda una tremenda resiliencia, ya que por su naturaleza, este deporte está lleno de fracasos. Antes de lograr un truco nuevo con la tabla, debes intentarlo 1000 veces y eso es pura pasión. La gran diferencia con el fútbol y quizás con la mayoría de los deportes clásicos, es que no se practica en equipo.Eres tú y la tabla, no hay nadie más persiguiéndote, tratando de quitarte la tabla o de meterte un punto. Es un deporte que se practica solo, pero en conjunto con más personas que, como tú, están sobre su tabla completamente solos, pero en compañía. Entonces no tiene ese factor competitivo que se define por puntos anotados a un rival, el factor competitivo es contigo mismo, es de uno poder empujarse a hacer cosas nuevas sobre la tabla, uno motivarse a explorar la ciudad en busca de nuevos lugares para poder patinarlos».
¿Cómo se define a una persona en riesgo social, bajo qué factores?
«Eso el Ministerio de Desarrollo Social lo tiene súper bien definido, sobre todo ahora que la encuesta CASEN mide la pobreza multidimensional, pero para nosotros un niño en riesgo social es ese que uno ve en el skatepark a las 11 de la mañana un día martes y uno se pregunta «por qué no está en el colegio», o es ese niño que uno sabe que tiene dramas en la casa. Para nosotros el niño en riesgo social no es solo ese que vive en una población sumergido en un entorno vulnerable, también es el niño que se cría frente a la televisión o que tiene hábitos sedentarios y sobrepeso.Que le cuesta relacionarse con su entorno o que es víctima de bullying».
¿Por qué crees que el deporte es clave para combatir el riesgo social?
«Esa pregunta da para largo, pero en síntesis es porque el deporte se basa en el «yo puedo». No solo el deporte es capaz de sacarte adelante no por donde naciste, tu red de contactos o tu nivel educativo, sino por las habilidades naturales de tu cuerpo, lo que además, y mirándolo en el sentido de todos esos niños que no tienen interés de ser deportistas profesionales, el deporte te genera una mentalidad de «yo puedo», te desvictimiza y te empuja a enfrentar la realidad desde un yo empoderado. Muchas de las personas en riesgo social creen que no pueden salir adelante, que esa es su realidad y ahí se quedan. No se les puede culpar, con las diferencias astronómicas que tenemos en nuestra sociedad la desesperanza aprendida, es cosa de tiempo para que cale en ellos. El deporte lo que hace es que te convence de que puedes aprender cosas nuevas, que tu cuerpo puede responder positivamente a los desafíos, que finalmente depende solo de ti y de nadie más».
¿Con quienes trabajan actualmente?
«Actualmente tenemos una operación montada en Lo Barnechea. Trabajamos directamente con Deportes Lo Barnechea administrando su skatepark, quienes desde un comienzo entendieron perfectamente lo que queríamos hacer. Ese skatepark puntualmente es tremendo, porque está entre el Cerro 18, el Mapocho y las poblaciones de Lo Barnechea, La Ermita, Juan Pablo II y la Bicentenario, es decir, los lugares más violentos del sector oriente, y el 80% de los niños con que trabajamos vienen de ahí».
¿Cómo se insertan en las poblaciones?
«Cuando partimos este proyecto, la comunidad no entendía bien que hacían un par de tontos todo el día en el skatepark hablando con los niños, haciendo clases gratuitas y actividades mensuales. De a poco se fueron dando cuenta que estábamos ahí para ayudar, para encausar niños que necesitaban ayuda y no sabían a quien pedírsela. Nosotros, por ejemplo, trabajamos muy en conjunto con la Oficina de la Infancia de la comuna, entonces a veces detectamos niños con problemas puntuales y los llevamos para allá, o ellos nos mandan niños para atacar en conjunto. De esa forma triangulamos entre la Oficina de la Infancia, nosotros y la familia del niño.
¿Qué avances notan en los niños y jóvenes?
«Muchos niñosno se abren en un box de atención psicológica, pero sí se abren después de una buena sesión de porrazos y skate, y ahí entramos nosotros. Los cambios que hemos presenciado en esa comunidad son tremendos, piensa que llevamos más de un año y el skatepark nunca ha sido rayado o grafiteado. Tenemos una política de cero alcohol y drogas dentro del skatepark y yo he visto cómo niños de 11 años corretean a adultos que vienen de otras comunas a patinar y que no saben que no se pude tomar cerveza dentro del park, defendiendo lo que sienten suyo. Nosotros incentivamos el sentido de pertenencia a los usuarios del parque.
Otro ejemplo es ver el compromiso de los niños con la escuela de skate, ¡no faltan a las clases! Incluso en invierno que son a las 9 de la mañana los sábados y domingos. Pero lo más notable fue el año pasado, que logramos meter de nuevo a un niño al colegioy que con mucho trabajo, reforzamiento, trabajo psiquiátrico y psicológico, logramos que terminara por primera vez un año escolar completo, y con promedio 6,4. Tener 16 años y estar aun pegado en 6º básico por cuarta vez, imagínate. Convencer a ese niño que de verdad puede pasar de curso, que el colegio no lo odia, que él de verdad puede, es tremendo.
¿Cuáles son sus proyecciones, pretenden extenderse a otras comunas?
«Este proyecto se planteó desde un principio modularmente, la idea es poder reproducirlo en más skateparks y más deportes. Este año queremos meterle academia a la fundación, poder hacer una tesis en base a nuestra experiencia y modelo de trabajo. Además, queremos crecer a otro skatepark más para el segundo semestre. Y en lo social, el año pasado apadrinamos a 12 niños, y este año queremos dar el salto a 65 niños.
Además de todo lo anterior, a finales del año pasado empezamos a perfilar nuestro modelo de trabajo que le llamamos AMD: Apoyo Multidisciplinario y que consiste en apoyar a los niños deportivamente (escuela de skate gratuita, actividades/competencia todos los meses, paseos a otros skateparks), académicamente (reinserción escolar y reforzamientos, entregando apoyo a los colegios cuando lo necesiten), y psicológicamente (integramos a un sicólogo al equipo); y además coordinamos con diferentes unidades sociales de la municipalidad, como el programa 24 Horas, la Oficina de la Infancia, la Unidad de Protección de Derechos, entre otros. Logrando así un trabajo en conjunto que ataca todos los posibles riesgos sociales».