El arquitecto Ramón Knoester aporta su grano de arena contra la contaminación de los océanos, reciclando parte de su basura y convirtiéndola en parques flotantes.
Los océanos están contaminados de una forma alarmante. Actualmente el 90 por ciento de las aves marinas tienen plástico en sus cuerpos debido a los patrones de ingestión. En 2050, ese número se prevé que habrá aumentado un 99 por ciento, y se dice que habrá más plástico en el océano que peces.
Entonces, ¿qué se está haciendo? No demasiado teniendo en cuenta lo agravante de la situación, pero a pequeña escala hay algunos ejemplos de personas que tomaron el asunto de forma personal y realizan acciones para el cambio.
Un arquitecto de los Países Bajos está tratando de hacer su parte para iniciar el camino de la recuperación – tomando el plástico desde el río Maas justo antes de que llegue el Mar del Norte y lo usa como material de construcción para parques y jardines flotantes.
Arquitecto e innovador, Ramón Knoester es el hombre detrás de la Fundación Recycled Island. Tendrá el primer jardín flotante en funcionamiento a finales de año en Rotterdam, dando al plástico contaminado un nuevo valor como una capacidad flotante para entornos verdes.